viernes, 13 de abril de 2007

Bestiario (IV)

(Licántropo)

Hondo aullido cuando intuye,
Afilándose en el cielo
O abortada tras las nubes,
Que la Luna va muriendo.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Mis Lunas seran llenas para ti, solo tienes que querer k te ilumine

Tu Mar

Anónimo dijo...

En realidad, Mar, el problema -y hablando sólo en el contexto de esta rima tan sencilla que, en este caso, muy poco tiene que ver con los sentimientos del autor, o sea yo, y mucho con la razón tan poco razonable que lo asiste, o desasiste- no está en los ciclos de la Luna, aunque influyan-, sino en el licántropo y en su concepción de la bestia que lleva dentro. ¿Porque aúlla cuando siente en su piel peluda que la Luna está en trance de desaparecer? ¿Tal vez porque se aproxima de nuevo la metamorfósis que habrá de hacer renacer a la bestia que lleva dentro y que la Luna llena dulcifica?

A veces, aunque suponga una aberración para lo normalmente establecido, es preciso dar la vuelta a las cosas. Puede que de este modo iniciemos caminos para acercarnos a la verdad o, por lo menos -o lo más- hacerla más diversa y flexible.

Este humilde bestiario que me he propuesto ir confeccionado ha de estar formado por muchas bestias, y no todas tienen que ser del reino animal como yo, ni todas han de estar dentro de mí, aunque todos seamos de algún modo un compendio de todas las bestias habidas y por haber.

Y, a pesar de lo oscuro que pueda parecer, no lo soy tanto. Me ilumina la luz de multitud de lunas y estrellas que nunca rechazo, que siempre quiero que me iluminen. Tu luz es radiante, aunque me fustigues con el dildo, jajajajaja.

Aaaaaauuuuuuuuuuuuuuuh.

Anónimo dijo...

Uyssssssss acusica... yo fustigarte... podios!!!

Tu Mar (yo no me meto ná no sea humano juasssssssssssssssssssss)

Anónimo dijo...

perdón por el chiste, pero después de leerlo he pensado:
claro, porque suena el despertador jajajaja
me voy
un beso.