martes, 10 de julio de 2007

Identidades

Te miro asombrado
Y no eres la misma.

O, tal vez,
Es que es otro el que te mira.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Da un poco de terror llegar a esa situación en que las miradas que han sido afectas se convierten en desconocidas, en pozos profundos de misterio y lejanía. Casi es mejor desistir y salir corriendo a buscar el espejo.

Anónimo dijo...

Estoy leyendo y no sé si soy yo quien lee o alguien que desconozco.
(posiblemente, lo último).
SALUDOS

Anónimo dijo...

Cambiamos..y también nustras miradas.

Un beso

Anónimo dijo...

Te leo y te reconozco