viernes, 19 de septiembre de 2008

La llama prodigiosa


A Manuela Rejas, siempre Violeta.

El color de la magia
No mana de un pincel en las manos del mago.
La magia es una llama, venero de ilusiones,
Que emerge como lo hace la luz de las estrellas:

Pura, dúctil, carente
------------------------------- de matices.

Que al fin sea turbia,
---------------------------------- limpia, negra o blanca
Resulta del pigmento que tiñe sus prodigios
En alma y corazón de quien los mira.


En la imagen: Cartel del documental "Violeta y el baúl americano",
protagonizado por Manuela Rejas.
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10 comentarios:

Anónimo dijo...

Pero qué sorpresa verte entre bastidores, haciendo pinitos en el cine.
Te felicito campeón, mi grandísimo poeta.

Anónimo dijo...

Magia emana este blog tan hermoso,magia emanan tus palabras...

Anónimo dijo...

Manuela Rejas debe de estar encantada con vosotros, y con tus bellas palabras dedicadas a ella.

Un abrazo Rafa.

Anónimo dijo...

La magia es la llama de una vela encendida; la magia la escribes tú cada día, además limpia y blanca.

Me ha gustado mucho Rafa.

Mil besos

Anónimo dijo...

Magia la de tus letras... siempre. Bellísimas
Beso

Anónimo dijo...

Cuando la mirada es como una saeta...

Anónimo dijo...

Esto es como dice un amigo mío, la belleza esta en los ojos de quien la contempla… y qué razón tiene, este poema es pura belleza.
Mil besos.
PD: No sé qué tiene que ver contigo Violeta y el baúl americano pero imagino que mucho, así que muchísima suerte.

Anónimo dijo...

Y la magia del cine, siempre sorprendiendo....como tus poemas. Un abrazo.

Anónimo dijo...

Magia la que hubo esta tarde en el salón donde vimos el corto dedicado a Manuela.
También tu poema dedicado a ella destapa la magia del escritor que se vuelca en la palabra.
Felicidades por todo ello.

Anónimo dijo...

Muchas gracias a todos. Lo cierto es que, como se dice en el argot, hubo mucha mierda -antiguamente a los espectáculos se iba en carruajes tirados por caballo y si en las calles adyacentes había mucha mierda de éstos... pues eso. Un acto, en el que el salón estaba hasta los topes, lleno de emotividad y encanto. Un acto en el que el juicio sobre los aspectos cinematógraficos me los reservo para más adelante, pero que en el plano humano nos llenó a los miembros del equipo que allí estuvimos y, espero, que a la mayoría de los asistentes. Felicitar, pues, a todo el equipo, al pueblo de Veguellina y a las dos personas, las dos únicas personas imprescindibles en este proyecto, las dos personas sin las cuales no hubiese sido posible: Paco Tovar, amigo, más que amigo un hermano, aunque no llevemos la misma sangre, ante todo ser humano; y Manuela, mi querida, nuestra querida Manuela, amiga para siempre y protagonista en sí y, sobre todo, símbolo, pretexto y excusa para hacer un homenaje a los valores que representa y a todas aquellas y aquellos que, como ella, nunca se han rendido y han entendido la vida no como una carrera en la que hay que competir para llegar en cabeza, sino como un camino a hacer, desde la cooperación y la solidaridad, todos juntos.

Gracias. Abrazos.

Ps. "n" no sabes lo que me alegra tu comentario, el comentario de alguien que, como yo, estuvo acompañando allí a Manuela y a lo que representa. Me hubiese gustado hablar contigo.