domingo, 10 de marzo de 2013

Dos

El dos es, con un par,
el número perfecto:
porque no hay dos sin tres
y tres son multitud
y es la unión de los muchos
la que nos hace fuertes.
El dos se opone al uno,
ese número bárbaro
-añádase una hache-
que, narcisista, mira
sólo hacia sí y por sí,
abriéndole el camino
al cero, lo vacío.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pareces Lewis Carroll el matemático que se enamoró de la poesía