domingo, 28 de julio de 2013

Caída libre


mis manos aletean
buscando un poco de aire

pero mis ojos
no sueñan no respiran tragan vértigo
el vértigo letal de la distancia
premonición de vísceras castradas

3 comentarios:

Vivian dijo...

Te abrazo Rafa!
A veces lo irremediable nos aturde, nos ciega. Creo que no hay distancias, sólo imposibles.
Besos.
Dos.
Gracias por la poesía hermosa! No la conocía, sí, lo acepto. Hay muchas cosas que no he leído.

Vivian dijo...

Me encanta la imagen.

La que vino de Júpiter. dijo...

Sólo la muerte es distancia y quizás tampoco.

Un beso, Rafa.