jueves, 10 de julio de 2014

Pócima


oh tú espejismo ahíto
de mi sed que te muerdes
y me muerdes la lengua
y la engulles y escupes
hecha añicos al árido
crisol donde engendrando
la esencia de una espada
suicida han de fundirse
el silencio y la ausencia

1 comentario:

Carlos dijo...

De la fusión del silencio y la ausencia nació la diosa melancolía